Capitulo XXVII (Primera Parte) De vuelta a la casa de la playa

Sara abre la puerta, y allí se encuentra a Harry, Marina y Mike. Harry al verla se despide, y los tres chicos van a dormirse.

El despertador suena a las doce de la mañana, aunque Sara hace horas que está despierta. Hoy es sábado y no hay clase. Sara sabe que Marina no va ha querer ir a la casa de la playa. No después de la que pasó el año pasado.

Mike hace dos horas que se ha ido porque tenía familia aquí y tenía que ir a visitarla. Sara se dirige a la habitación de Marina y ella está dormida en la cama.

- Marina nos vamos por ahí.

- ¿Ahora? - dice ella medio dormida – Me da mucho palo.

- Harry también viene – le dice Sara.

- ¿Harry también? - dice Marina incorporándose un poco pero luego vuelve a sentarse – Me da igual estoy demasiado cansada.

- Vamos a la piscina y estará sin camiseta – dice Sara. Le suelta una pequeña mentira pero es por su bien.

- Te espero a bajo – dice Marina de golpe.

Sara y ella se visten y se ponen el bañador. Bajan a bajo y los chicos ya han bajado. Marina los mira con una sonrisa.

- ¿Ventana?

- No – dice Zayn – Puerta.

- Me disteis una copia de la llave – dice Lily con una sonrisa mientras levanta la llave.

- ¿Vamos? - pregunta Sara.

- Claro – dice Marina – ¿A que piscina vamos?

- ¿Piscina? - dice Julia.

- Si... Sara me dijo que íbamos a la piscina – dice Marina.

- Bueno vamos al agua, pero no exactamente a la piscina – dice Harry.

- ¿Entonces?

- Vamos a la casa de la playa de Niall.

Marina se queda blanca de repente. Un montón de recuerdos le vienen a la cabeza. Sobretodo esas cuatro paredes blancas del hospital. Los chicos se asustan porque Marina está completamente paralizada. Ella no puede moverse. Todo le recuerda al accidente del tiburón.

- Marina, ¿estas bien? - pregunta Harry.

- Tu que crees Harry. El recuerdo de la playa de la casa de Niall no es exactamente agradable Harry.

- Pero si no pasó nada en la pla... - dice Harry pero se queda callado – Oh – dice dándose cuenta del problema.

- No puedo ir – dice Marina.

- Marina tienes que intentarlo – le dice Louis.

- No puedo Lou... Son demasiados recuerdos – dice ella mientras se lleva las manos a la cabeza. 

- Te prometo que no va a pasar nada – dice Harry – Yo estaré allí para protegerte.

- No... no puedo. Lo siento.

- Bueno, lo entiendo, no pasa nada yo me quedo aquí contigo – dice Harry

- No, Harry, no tienes porque quedarte. Ve y diviértete.

- No. Si tu no vas yo no voy.

- Te he dicho que tienes que ir, no voy a retenerte aquí.

- Yo voy dónde tu vayas.

- Uf, vale, pues vamos – dice finalmente.

- ¡Yupi! - grita Louis.

- Pues decidido. Nos vamos todos a la casa de la playa.

Un rato después, estaban todos en sus casas haciendo la maleta para pasar el fin de semana en la playa.

Cuando ya están todos listos quedan que los chicos van a recoger a Marina y Sara a su casa y después van a la casa de la playa de Niall.

El viaje no dura mucho y cuando llegan van todos a instalarse.

Marina está de espaldas a la puerta mientras saca la ropa de la maleta cuando de repente siente unas manos encima de sus hombros.

- ¡Harry! Cómo vuelvas a hacerme eso te quedarás sin rizos.

- ¡No! ¡Mis rizos no!

- Pues no me hagas esos sustos.

- Vaaaaale – contesta sonriendo.

Se sienta en la cama mientras Marina saca más cosas de la maleta

De repente Harry se levanta y coge a Marina cómo una princesa.

- Ehhhh ¿Que haces? - pregunta ella confundida.

- Nada – responde cómo si nada.

- Pues si no haces nada puedes ponerme otra vez en el suelo que tengo que terminar con la maleta

- No.

- ¿Y eso porqué?

- No quiero.

- Vale, pues haz lo que quieras – dice suspirando.

Salen de casa y empiezan a andar por la playa hacia el agua.

- Te juro que cómo me tires al agua, esto – Marina coge un rizo de Harry – va a tener problemas.

- No te voy a tirar al agua.

Entonces es cuando Marina se da cuenta de la presencia de el yate del que se tiró cuando pasó lo del tiburón.

Harry empieza a acercarse hacia allí.

- Harry, no quiero subir allí – le dice Marina cuando están a punto de entrar.

- Venga, no te vas a caer y nadie va a tirarte al agua. Y tengo una sorpresa para tí.

- Es que....

- Porfaaaaaaaa – poner cara de cachorrito.

- Ay – se queja Marina – debería ser un delito que hicieras esa carita.

Harry la coge de la mano y entran juntos al yate. Harry la lleva hacia la parte delantera dónde se puede ver el agua, y Marina se queda inmóvil de repente.

- Harry ¿qué es eso? - dice asustada.

- ¿El qué? - pregunta tranquilamente este.

- Eso – Marina señala la aleta de tiburón que sobresale del agua

- No pasa nada, él está en el agua y nosotros en el barco. No puede hacernos...

- Holaaa – dice Nial sacando la cabeza con una aleta de tiburón pegada del agua mientras suelta una risa.

Y de repente se oyen unas carcajadas provenientes de la orilla y Harry y Marina ven a Louis carcajeándose encima de la arena.

- Yo los mato – dice Marina antes se salir del yete y dirigirse hacia Louis. Cuando llega a su lado, Louis ha conseguido levantarse de la arena e intenta alejarse de Marina pero no puede porque de tanto reír se va cayendo al suelo.

Marina lo agarra de la camiseta y le da una colleja que puede oír hasta Harry.

- ¡¡¡¿TÚ QUIERES MATARME DE UN SUSTO O QUÉ?!!!

Louis no puede para se reír. Cuando Niall sale del agua Marina va directa hacia él.

- ¡¡¡¿Y A TÍ CÓMO SE TE OCURRE PARTICIPAR EN ESO?!!!

- Lo siento – dice él aunque sin quitar una sonrisa de su cara.

- ¡¡AL MENOS TU TE DISCULPAS!! ese – señala a Louis – esta tan ocupado riéndose que no puede ni respirar.

En ese momento llega Harry al lado de Marina.

- ¿Estás bien? - le pregunta a su novia.

- Sí – dice ella más calmada - ¿Tu sabías algo de esto?

- No, claro que no. Me he asustado cuando he visto la aleta de tiburón, aunque no tanto cómo tú. ¿Estás bien?

- Ya te he dicho que sí.

- Vale, mejor nos vamos a casa.

- Buena idea.

Y se marchan los dos pero Marina no se olvida de dirigir les una mirada asesina a Niall y Louis, que sigue carcajeándose encima de la arena.

Por la tarde...

Marina se está bañando con Sara, Julia y Lily mientras lo chicos están en la arena.

- ¿Estás bien, Marina? - le pregunta Harry por enesima vez.

- Harry, ya te he dicho que si

- Vale, pero es que estoy preocupado

Siguen bañandose hasta que un minuto después Harry vuelve a hablar.

- Marina, ¿Sigues bien?

- Harry, el que no va a estar bien si sigues preguntando eso eres tu.

- Vale, vale, ya me callo - dijo besándola. La quería. Y mucho.

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Está bien. Os dejo matarnos, porque nos lo merecemos. De verdad lo sentimos mucho pero han habído complicaciones, y encima con el instii son muchas cosas, pero siempre intentamos subir cuando podemos. Lo sentimos mucho de verdad :(

Por favor comentad <3